Acabas de estrenar unos zapatos estupendos o unas sandalias y, tras todo un día de lucir el nuevo calzado y comprobar que se adaptan a tus pies como un guante, llegas a casa, te descalzas y descubres con estupor que tus pies o calcetines están manchados porque los zapatos ¡han desteñido!.
La situación es bastante molesta, pero hay algunos remedios caseros que podemos probar para evitar que esos zapatos que tanto nos gustan no nos arruinen los calcetines o directamente nos manchen los pies con el tinte.
En primer lugar, hay que tener claro por qué destiñen unos zapatos. Si bien la mayoría de las marcas de calidad suelen tintar sus modelos con pinturas especiales que evitan en su mayor parte que destiñan, que este hecho se produzca depende de diversos factores: exceso de tinte, sellado incompleto, sudoración excesiva, pH de cada persona, etc. En definitiva, se produce un exceso de tinte que hay que evitar.
Lo primero que deberemos hacer ante ese posible exceso de pintura, es limpiar el interior de los zapatos con un paño húmedo y probar si así solucionamos el problema. Si no es así, tendremos que utilizar algún remedio que fije adecuadamente el tinte de la cara interna de nuestros zapatos.
Uno de los remedios más utilizados para evitar que el tinte se desprenda de los zapatos y acabe donde no debe, es la aplicación de una capa generosa de vaselina por la parte interna del zapato o sandalia que queramos proteger. Dejaremos que el producto actúe un mínimo de un día y seguidamente retiraremos el exceso de vaselina con un paño limpio. Habitualmente el problema quedará resuelto con este método. Como medida alternativa, podemos utilizar una crema de zapatos incolora y aplicarla en la misma parte interna del calzado, ya que dichas cremas suelen llevar componentes impermeables que servirán para fijar el tinte.
Si después de aplicar el primer método seguimos teniendo algún problema, podemos utilizar un método algo más agresivo y eficaz: la laca. Como producto fijador que es, la utilizaremos para evitar que el tinte siga escapándose de la zona interna del zapato. Aplicaremos igualmente una capa generosa de laca y esperaremos 24 horas. A buen seguro que después de utilizar este método, nuestro problema con los zapatos que destiñen se habrá solucionado.
Como has podido observar, el problema de unos zapatos que destiñen tiene una solución sencilla y económica que nos evitará muchos disgustos a la hora de calzarnos ese modelo de sandalias, zapatos o botas que tanto nos gusta.
Estaros atentos al blog porque seguiremos publicando artículos sobre el cuidado de nuestro calzado, así como soluciones a los problemas más comunes que puedan surgir en relación con los mismos.
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