El calzado de la marca Callaghan se fabrica en España, desde donde la marca controla el proceso de producción a través del uso de pieles y materiales de alta calidad. La artesanía y la experiencia son las características que mejor describen al equipo de Callaghan, que combina su estricta producción con las últimas tecnologías y diseños. En cuanto a estos, Callaghan los comprende como el valor esencial de sus zapatos ya que, son realizados por expertos del patronaje, que son quienes constituyen el ADN de la marca de calzado. Para ello, parten de tres conceptos como base: comodidad, calidad y Adaptaction. Para lograr el éxito de este sistema, a diferencia del resto de marcas, Callaghan diseña sus zapatos empezando por la suela. A través de programas 3D, la firma desarrolla las diversas hormas y ajuste del resto de elementos.
Sí. Desde sus inicios, hace 50 años, Callaghan se ha dedicado en profundidad a la innovación tecnológica, combinándola con la artesanía de sus procesos de producción y con el confort y el diseño entre sus objetivos. Así, Callaghan ha desarrollado en concreto la tecnología Callaghan Adaptaction, patentado internacionalmente y que está en constante evolución. Este sistema es el resultado de un estudio exhaustivo de la pisada. Gracias a su suela, capaz de reproducir los movimientos del pie, el calzado Callaghan se adapta a la anchura del mismo en el momento de caminar.
Sí. El uso de energías renovables es uno de los cimientos de Callaghan como marca comprometida con el medio ambiente. La plantación de un bosque de 6 hectáreas de más de 30.000 árboles forma parte de una de las actuaciones sostenibles de la marca, con el fin de compensar el 100% de las emisiones de CO2 en su fabricación. Además, Callaghan aplica las 3Rs (Reducir, Reutilizar y Reciclar) y continúa en su labor de innovar en la tecnología del calzado con el propósito de desarrollar alternativas sostenibles.